Lamento que haya gente que se escandalice porque Excalibur
haya conseguido doscientas y pico mil firmas de apoyo en contra de su
sacrificio, en esa lista a mi pesar no estaba mi firma, no me enteré a tiempo
para poder firmar.
Que haya otros intereses de “humanos” que no alcanzan tal
cifra no me espanta ni me exaspera, estamos en un país donde hay más tontos que
botellines, en un país totalmente cainita donde la envidia es un valor seguro
para alcanzar la medalla de oro de una posible olmpiada en tal disciplina.
Total aquí cada uno va a su propio interés sin importar quien caiga por lograr
su antojo, somos los reyes de la economía sumergida, de la corrupción a todos
los niveles, hasta el más ínfimo, yo no quiero pensar qué enredo nos hace el
administrador de mi finca. Encadenamos uno tras otro los casos de choriceo más
cruel, Afinsa, Caja Madrid. Etcétera, hasta Matesa y Reace suenan a risa.
Que la sanidad haya salido tocada con los recortes es
algo que lo podemos ver día a día, más colas, más lista de espera, menos
medios, peor atención. Pero lo que nunca imaginaba que a nivel ministerial
íbamos a estar al mismo nivel de cuando estalló la epidemia provocada por el
aceite de colza, vamos que podía haber hecho suyas las fantásticas palabras de
su predecesor Jesús Sancho Rof: "(El
síndrome)....es menos grave que la gripe. Lo causa un bichito del que conocemos
el nombre y el primer apellido. Nos falta el segundo. Es tan pequeño que, si se
cae de la mesa, se mata".
Mi blog lo tengo solo para relatos, excepcionalmente lo
uso para temas de actualidad, alguna victoria de mi atleti ha figurado y
también una diatriba contra la explotación animal en los circos, pero hay algo
que me exaspera y no lo puedo evitar, el sufrimiento gratuito contra los
animales, Excalibur es eso, una víctima más de la incompetencia humana, este
año el toro de la Vega ha tenido dos animales alanceados, como el astado, no ha
tenido ninguna oportunidad ni miramiento alguno. Solo espero que desde el cielo
de los animales nos mire con sus tiernos ojos y nos perdone.
No hay comentarios:
Publicar un comentario